Una amenaza recibió ayer en el refugio de la Fundación Amigos Protectores de los Animales (Famproa), quienes hallaron a las puertas del lugar el cadáver de un cachorro con sus órganos expuestos y, junto a él, dos ramos de flores.
La presidenta del centro, en el sector Montañalta de Carrizal, María de los Ángeles Arteaga, dijo que dos voluntarios recibieron advertencias de vecinos de que tomarían medidas drásticas contra los perros si no cerraban el refugio. «Con nuestros propios recursos mantenemos a los animales; ningún ente nos ayuda. Hacemos demasiado para sacarlos de la calle y que dejen de ser un problema», dijo.
La noticia generó comentarios de repudio por las redes sociales.
Fuente: Entorno Inteligente