Con la llegada del calor del verano hacen su aparición las moscas, pulgas y garrapatas en los cuerpos de las mascotas. Veamos cómo mantenerlas bajo control.
Las garrapatas
Las garrapatas son parásitos que viven fuera del organismo del huésped. Son hematófagas, ya que se alimentan de la sangre. Esto último las convierte en vectores de un grupo de enfermedades que ponen en riesgo la salud de las mascotas en el hogar, e incluso la de sus amos. Las garrapatas encontradas en los perros son por lo general de color marrón rojizo y miden entre 3 milímetros y 1,5 centímetros. Su tamaño varía dependiendo de la cantidad de sangre succionada. Abundan en lugares como arbustos, árboles y gramas. Se posan en la parte más elevada de la grama y esperan a que el animal roce la hoja mientras éste no lo percibe. Las garrapatas se agarran del pelaje con sus ocho patas para luego movilizarse a las zonas donde tienen fácil acceso al flujo sanguíneo.
Las zonas más propensas a las mismas son entre los dedos de las patas, la nuca, el cuello, las orejas y las áreas aledañas a los ojos, las axilas y la barriga. Allí, la garrapata procede a perforar la piel con su boca para comenzar el proceso de succión.
La pulga
La pulga, por su parte, es un insecto más pequeño y a pesar de que no posee alas salta distancias descomunales, cualidad que le permite atacar a los huéspedes con una gran facilidad y rapidez. Las hembras depositan sus huevos sobre las mascotas. La larva al salir del huevo abandona al huésped y busca lugares óptimos para su desarrollo como las alfombras, muebles y grietas del piso.
¡Alerta!
Las Garrapatas y pulgas atacan a los perros y a los gatos sin discriminación y representan una amenaza para su bienestar. Las heridas en la piel producto de las picadas hacen que el animal se rasque o se muerda constantemente, lastimando su piel. La pérdida de mucha sangre conlleva a deshidrataciones y anemias que se manifiestan en decaimiento y pérdida del apetito. Esto muchas veces pasa desapercibido, pues la saliva de la garrapata contiene enzimas anestésicas que duermen la zona de la mordedura, el animal no siente, y la garrapata no lo suelta hasta estar saciada.
¿Cuales son las enfermedades que pueden provocar?
Ambos parásitos son vectores potenciales de muchas enfermedades a través del contacto de su saliva y heces fecales con las heridas. Son responsables de causar tifus canina, borreliosis, babesiosis y anaplasmosis canina o felina. Incluso existe una afección llamada la “tenia del perro” causada por la ingesta directa de la pulga por parte del perro.
Algunos de los síntomas en las mascotas son la pérdida de peso, fiebre, diarrea, inflamaciones, hemorragias, letargo y anorexia, entre otras. Puede llegar a ser mortal por fallo hepático o renal.
¿Qué hacer para exterminar pulgas y garrapatas?
Revise a las mascotas diariamente. Aplica una ligera presión sobre el pelaje para localizar protuberancias sobre la piel. De todas maneras te recomiendo que si al revisarlo le encontraste muchas es importante que tu médico veterinario le haga un examen de sangre para comprobar si estos parásitos le transmitieron alguna enfermedad y tratarla.
Utiliza pinzas especiales para extraer garrapatas o guantes plásticos para evitar infecciones. Una vez extraídas, colócalas en un recipiente lleno de alcohol para asegurarte el exterminio total.
Medidas preventivas ¿Qué productos utilizar?
- Jabones, champús, talcos y cremas anti parásitos como prevención. Los collares anti pulgas ofrecen protección adicional a las mascotas, sobre todo en la calle.
- La limpieza del hogar es fundamental para la desaparición de huevos, larvas y desechos fecales.
- Es necesario aspirar constantemente las áreas comunes donde los perros y gatos pernocten, prestando especial atención a las camas, cestas y casetas del perro. En el caso de infestaciones extremas se debe llamar a un exterminador para aplicar insecticidas u otros agentes químicos de gran intensidad. Aunque será necesaria la opinión profesional de un veterinario
Fuente: Mascotas.org
Fotos: Fondosdepantalla/tuscachorros.com