Según informa una publicación neozelandesa (Manawatu Standar) un investigador de la Massey University (Nueva Zelanda) está trabajando en la primera vacuna para el más común y fatal tipo de cáncer felino de piel. El Dr John Munday afirma que existe una «fuerte evidencia» de que la vacuna puede trabajar igual que los tratamientos que ayudan a prevenir el cáncer de cuello uterino en personas. Esto se debe a que el virus afecta al cuerpo del gato de una manera similar.
«Si aprovechamos el conocimiento que tenemos sobre cómo afecta este cáncer a las personas, parece que por fin será posible prevenir algún tipo de cáncer de piel en gatos. Ser capaces de prevenir esta patología se puede considerar definitivamente como un avance importante».
El Dr. Munday fue el investigador de este tipo de papilomavirus. Casi la mitad de los gatos transportan el virus y están infectados sin ninguna consecuencia negativa. No obstante, para el escaso número de gatos infectados que desarrollan el cáncer éste puede ser fatal. Actualmente no hay métodos efectivos para prevenir o curar la infección causada por el virus. Una vez que se haya completado la investigación en los próximos años la vacuna se podrá utilizar a escala global .
El año pasado el Dr. Munday también fue el primero en descubrir los orígenes de otro virus felino —el papiloma felino asociado a sarcoma— y de confirmar su existencia en Nueva Zelanda. Este virus causa un segundo tipo de cáncer de piel en gatos poco habitual. Las investigaciones parecen indicar que también está presente en vacas, sin embargo para ellas no es perjudicial. Los gatos que viven en lugares donde hay vacas pueden contraer la enfermedad a través de heridas en su piel.
Fuente: www.portalveterinaria.com