Elisa Lasprilla Pérez nació en la ciudad de Barranquilla-Colombia, el 18 de febrero de 1960. Su padre y mano derecha José Manuel Lasprilla fue ingeniero mecánico y creador de las Industrias ITA (Industrias Tecno Agrícolas) en Colombia. Su madre, Norys Pérez se destacó por ser una mujer muy valiente y sobre protectora con sus tres hijos a quienes desde muy temprana edad les inculcó el valor del respeto y la solidaridad entre unos a otros como forma de vida.
A pesar de que sus padres se divorciaron cuando apenas tenía seis años, Elisa mantuvo el contacto, la afinidad y el respeto hacia su progenitor. Además de que lo consideró su gran apoyo y ejemplo a seguir por la disciplina, constancia y coraje que lo caracterizó a lo largo de su vida. “Mi papá siempre estuvo ahí, -presente- en las navidades, pendiente de nuestro comportamiento, de nuestras calificaciones y sobretodo de nuestros intereses. Yo siempre lo acompañaba todos los meses de julio (durante mis vacaciones) a su negocio y también asistía a las reuniones de Junta directiva de la Asociación de Comercio a la cual él pertenecía, aún cuando yo tenia recién los 14 – 15 años”.
Su infancia y adolescencia transcurrió en Colombia junto a su madre y sus hermanos hasta 1977 cuando obtuvo su titulo de bachiller en el Colegio Alemán de Barranquilla consiguiendo además un diploma del idioma alemán, como lengua extranjera. Así mismo tuvo la dicha de tener a su primer hijo, Jaime, quien a su vez fue su mayor incentivo para seguir adelante junto a sus seres queridos.
Para finales de los años 70’s diversos acontecimientos familiares resultaron para que abandonaran Colombia -su tierra natal- por lo que llegaron a Venezuela –hoy su segunda Patria- a comenzar una nueva historia en medio de aprendizajes y experiencias enriquecedoras que determinaron la actitud que debían tener frente a la vida. “La circunstancia familiar de dejar Colombia, de la mano de mi madre, quien nunca trabajó ya que mi papá nos mantenía con todo, hizo que tomáramos las riendas de nuestras vidas muy jóvenes. Nunca miramos para atrás ni nos preguntamos por qué…solo avanzamos en el camino que íbamos construyendo juntos. Existió mucha solidaridad entre nosotros…creo que fue lo más relevante y valioso” comentó.
Una vez establecidos en Venezuela, Elisa asume la responsabilidad de trabajar de forma intensiva para ganar dinero y mantener a su hijo y ayudar a su madre. La joven emprendedora realizaba los fines de semana desde traducciones hasta revisiones exhaustivas de textos técnicos como método extra curricular.
Para 1979 ingresa a la empresa Siemens en Caracas “esta fue mi primera experiencia laboral y puedo decir con absoluta certeza que fue excelente. Allí aprendí mucho y siempre tuve la solidaridad de mi jefe y de mis compañeros de trabajo desde todo punto de vista”. Relató Lasprilla.
Las oportunidades para esta mujer que hoy día su hijo menor define como: “Workahólica” no cesaban ya que en 1982 ingresa a Telenorma a continuar su formación personal y profesional. Sin embargo, es en 1985 cuando se le presenta una gran oportunidad laboral y de crecimiento profesional.
Con 25 años de edad ingresa a Bayer de Venezuela como secretaria bilingüe de alemán-español en el área de ventas y técnica. Es en ese momento que descubre que su pasión, su chispa y carisma apuntaban a un área tal como el mercadeo, las ventas y el manejo de relaciones con los clientes. Por tal motivo toma la decisión de prepararse profesionalmente en el Área de Mercadeo en el Instituto Universitario de Mercadotecnia (ISUM), en donde se gradúa en 1996 triunfante, enérgica y dispuesta a seguir desarrollándose en esta área en la empresa que le abrió las puertas a su crecimiento profesional.
Posteriormente, con titulo en mano comienza a nutrir su carrera con diversos cursos y especializaciones tales como: Mercadeo de Servicios (CIEC, Venezuela); Finanzas para Ejecutivos no financieros (IESA, Venezuela); Gerencia Estratégica de Mercadeo (IESA, Venezuela) y una Especialización en Mercadeo en la Universidad de los Andes de Bogotá en Colombia.
La trayectoria profesional de Elisa Lasprilla según su afirmación tuvo un desarrollo en Bayer de Venezuela “sencillamente espectacular” ya que se inició como secretaria bilingüe en alemán-español para luego trabajar como asistente. Después pasó al área de marketing junior, meses después ocupó el cargo senior. Posteriormente se desempeñó como Ejecutiva de cuentas claves y mercadeo, gerente de mercadeo y ventas hasta llegar a su cargo actual, Responsable de la Línea Animales de Compañía de Bayer para Venezuela. “¡Soy un ejemplo de que SÍ se puede” puntualizó complacida.
Su participación en la elaboración de Normas para el Registro de los Productos Veterinarios en Venezuela es parte de su aporte profesional dirigido en pro de la salud animal. Asimismo la línea de productos Animales de Compañía que maneja se ha mantenido en el puesto Nº 1 en el mercado venezolano a lo largo de 26 años conjuntamente con el esfuerzo de sus colegas y la aceptación por parte del público. Además de la confianza de sus colegas en la industria y en la empresa y el apoyo por parte de sus superiores en su gestión le ha traído la dicha de haber contribuido a satisfacer las necesidades de un público que requiere calidad de vida para sus mascotas.
Trabajadora y positiva al 100%
El hijo menor de la especialista en Mercadeo y Responsable de la Línea de Animales de Compañía de Bayer para Venezuela, comentó que desde que tiene uso de razón ha visto a su madre como una persona muy valiente, positiva y “workahólica” (Ó su nombre original en inglés workaholic que trata de describir a una persona a quien le gusta, ama y es adicta al trabajo). A lo cual Elisa manifestó “Tengo un ritmo «diferente» a la gran mayoría de la gente. NUNCA he podido entender lo que afirman los coaching empresariales en el sentido que «el ritmo del equipo lo determina el miembro más lento»….para mí eso es terrible. Porque soy híper independiente”
-¿Cómo fue de pequeña la relación con sus hermanos, de ellos, era la mas disciplinada, estudiosa ó traviesa?
Siempre tuve buenas relaciones con mis hermanos, sobre todo aceptando las diferencias que teníamos unos de otros. Mi hermano mayor José Manuel siempre fue muy tranquilo, estudioso y analítico al extremo. Mi hermana Norys a quien le decimos Norita era terrible… (Risas) siempre quería hacer su voluntad y yo la dejaba…yo tenia otros intereses. En ese entonces, asumo que era disciplinada y muy estudiosa…pero parrandera (y ¿Quién no en la Costa Colombiana?). (Risas)…
-¿Cuál es la travesura que más recuerda?
Cuando tenia 15 años me escapaba para bailar en la feria ganadera de Sabana Larga, donde hacían unas exposiciones de ganado y caballos de paso espectaculares. Una amiga me recogía en la puerta, yo escondía la pequeña maleta y salía corriendo…cuando regresaba el domingo… ¡Ayyyy!, mi mamá y mi novio ¡enfurecidos!
-¿En la actualidad es casada? ¿Alguno de sus hijos comparte la profesión que Ud. ejerce?
Soy divorciada. Y mis dos hijos mis amigos por siempre. El mayor es graduado en Mercadeo y el menor está estudiando Publicidad y Mercadeo…Creo que los influencié con mi pasión por esta increíble área. Son disciplinados y nuestra relación ha sido marcada por la solidaridad y los acuerdos.
-¿Qué le gusta hacer en sus tiempos libres?
Ir a la playa, leer, bailar, viajar y caminar al aire libre.
-¿Un buen recuerdo en el área profesional?
Cuando trabajaba como asistente en el área de ventas y mercadeo mi jefe en esa época, Guenther Kehrhahn me pidió acompañarlo a una reunión y me presentó como la nueva Marketing Junior de la Línea de Animales de Compañía, fue una gran alegría y satisfacción por el reconocimiento a una labor que venia desempeñando más allá de mi cargo.
-¿Una anécdota para compartir?
Mis colegas me identifican con una frase: ¡Si se puede! Otra cosa, he sido una excepción en Bayer, por meritocracia, conocimientos y actitud. Obtuve responsabilidades de marketing, aún sin tener un título universitario. Esto fue un gran voto de confianza para mí.
-¿Le gustan los animales? ¿A otro miembro de la familia le gustan los animales?
Cuando vivía en Colombia teníamos 4 perros en casa. Júpiter un cacri marrón y blanco; Otelo y Gunga, dos pastores alemán entrenados y un perrito faldero para estar dentro de la casa. Mi papá adoraba los perros, su predilección era la raza germana y tenia 20 pastores alemán en su finca en la Sierra Nevada de Santa Marta, Colombia. Hoy en día no tengo mascota, lamentablemente. Tuve una de mi hijo, muy cerquita por corto tiempo pero la recuerdo mucho….Fofa, ése es su nombre, una bulldog inglés que le regalaron pero tuvo que dejarla en poder de una familia que podía cuidar de ella.
-¿Cómo evalúa la situación de la Salud Animal en Venezuela?
Un área de mucha oportunidad en todos los sentidos. Muchas cosas por hacer y gente que sabe cómo hacerlo.
–Actualmente, ¿Cuál considera usted es el principal problema que enfrenta el Sector y la Industria de la Salud Animal en nuestro país?
La inseguridad jurídica que disminuye la confianza para invertir en un país que podría convertirse en un gran desarrollo en el área de la ganadería, avicultura y porcicultura por sus excelentes tierras, clima y geografía, en general. Por otra parte, la falta de implementación de campañas sanitarias constantes para disminuir los riesgos de enfermedades que sin duda alguna afecta también a la población de venezolanos.
Lic. Mariela Delgado G.
Fotos: Cortesía (Elisa Lasprilla)