Las condiciones físicas del animal se ven reflejadas en su apariencia externa. El pelo en mal estado es signo de problemas internos. Una mascota con pelaje brillante y suave atrae miradas. El cuidado de esa parte del cuerpo es esencial. Además de su aspecto estético, el pelaje recubre y protege la piel de perros y gatos. Evita que el animal esté vulnerable a factores externos. “Funciona como una barrera ante las inclemencias del ambiente”, explica Jorge Dokmadji, médico veterinario.
Una de las claves para lucir un pelo frondoso es que el animal se encuentre sano. Cuando la mascota sufre alguna patología, las consecuencias se observan, primero, en la apariencia física. Si se pone opaco, se cae con frecuencia, no tiene continuidad o es muy bajo es indicativo de que algo anda mal. “El pelaje es reflejo de salud. Si está en mal estado puede ser producto de problemas físicos, internos o de nutrición”, señala Dokmadji.
Débora González, dermatólogo veterinario, afirma que cuando un animal presenta alteraciones en sus condiciones lo primero que se evalúa es la abundancia y largo del pelo. Si tiene poco y además con caspa es signo de que la mascota padece problemas de piel y algún inconveniente secundario interno. González añade que esos síntomas se ven en casos de hipotiroidismo, una enfermedad de la hormona tiroidea: “Se disminuye la función de la hormona. Además de pelo seco y otros problemas, produce aumento de peso en los animales”.
El hiperadrenocorticismo, también conocido como síndrome de Cushing, es otra enfermedad en la que se ven esos síntomas. En ese caso, la irregularidad se presenta en las glándulas adrenales.
Es importante tener en cuenta que la caída del pelo no siempre es sinónimo de malestar en la mascota. Dokmadji señala que perros y gatos lo mudan normalmente dos veces al año. Cuando el ciclo natural de la caída de pelo se rompe y la pérdida empieza a ser frecuente y abundante es momento de preocuparse. “Las causas muchas veces son metabólicas. Puede ser por problemas de alimentación o por la presencia de pulgas, parásitos o alergias”, revela. En el último caso la disminución del pelaje se observa en zonas específicas, como aquellas en las que el animal se rasca.
El cambio de coloración también influye. González indica que cuando el pelo blanco empieza a tomar un color marrón, casi vinotinto, revela que el animal se lame en exceso y, a su vez, es un signo de problemas en la piel.
Nutrición. Hay formas sencillas para prevenir la aparición de enfermedades y garantizar un pelo deslumbrante en las mascotas. Una buena alimentación es primordial. Lo importante es que las mascotas ingieran comida creada especialmente para ellas.
Darles sobras de humanos está prohibido. La cantidad de azúcar y sal que contienen es dañina para los animales. Dokmadji indica que eso les causa hepatitis. En especial a los perros, que son los que generalmente acostumbran a comer los restos.
Aseado. El baño adecuado de las mascotas tiene consecuencias positivas en la salud del pelaje. Pero los excesos son malos. Dokmadji aconseja bañar la mascota una vez al mes, como máximo. Es imprescindible que el propietario sea cauteloso al someter a su animal a los químicos.
González indica que el champú debe ser neutro y destinado al uso de perros o gatos. Existen productos que pueden aplicarse en ambos animales, pero el champú de humanos es nocivo para las mascotas. “Los animales no tienen glándulas sudoríparas, por lo que no exteriorizan los químicos que poseen los productos para personas”, argumenta González.
Si tienen caspa, los especialistas recomiendan evitar los productos para matar pulgas, pues con el tiempo esas lociones se absorben y producen cambios hepáticos.
Tanto los cortes como la manera de peinar a las mascotas varían dependiendo de la raza. Existen diversos modelos de cepillos en el mercado. Es importante consultar al veterinario para saber cuál es el más adecuado. González advierte que sin importar el tipo de animal no se debe peinar en diagonal porque eso lo lastima. Luis Caro, peluquero de mascotas, afirma que a los gatos se les puede peinar dos veces a la semana, mientras que a los perros recomienda hacerlo un día por medio.
Fuente: El Nacional
