Los perros son un posible reservorio para una futura pandemia de influenza, según concluye un estudio cuyos resultados se publican en la revista ‘mBio’. La investigación demostró que el virus de la gripe puede pasar de los cerdos a los canidos y que la gripe se está diversificando cada vez más en los canidos.
“La mayoría de las pandemias se han vinculado con los cerdos como huésped intermedio entre los virus de las aves y los huéspedes humanos. En este estudio, identificamos los virus de la gripe saltando de los cerdos a los perros”, dice el investigador principal del estudio, Adolfo García-Sastre, director de ‘Global Health and Emerging Pathogens Institute’ y científico del Centro de investigación sobre la Patogénesis de la Influenza (CRIP) de la Escuela de Medicina Icahn en el Monte Sinai, en Nueva York, Estados Unidos.
La influenza puede saltar entre reservorios animales donde se encuentran muchas cepas diferentes; estos depósitos sirven como cuencos de mezcla para la diversidad genética de cepas. La influenza pandémica ocurre cuando los virus saltan de los reservorios animales a los humanos; sin exposición previa al virus, la mayoría de las personas no tienen inmunidad frente a estos virus.
Los principales huéspedes animales para la influenza son aves silvestres, aves de corral y otras aves domésticas de un grupo de especies; el cerdo; y los caballos. Algunos de los genes virales del virus pandémico H1N1 2009 se originaron en aves, de un virus aviar que saltó a los cerdos, intercambiaron algunos de sus genes con virus porcinos que circulaban previamente y luego pasaron de los cerdos a los humanos.
Las aves y los cerdos son reservas importantes de diversidad genética viral, mientras que los équidos y los caninos se han limitado históricamente a uno o dos linajes estables de virus de influenza A con transmisión nula o muy limitada a humanos.
Hace 15 años, los científicos documentaron de un virus de la gripe en un caballo que saltó a un perro, y esto creó los primeros virus de la influenza canina circulantes. Hace cinco años, los investigadores identificaron un virus de la gripe canina H3N2 de origen aviar que circula en perros de granja en Guangdong, China.
“En nuestro estudio, lo que hemos encontrado es otro conjunto de virus que provienen de cerdos que originalmente son de origen aviar, y ahora están saltando a los perros y han sido recombinados con otros virus en perros. Ahora, tenemos H1N1, H3N2 y H3N8 en perros. Están comenzando a interactuar unos con otros. Esto recuerda mucho a lo que sucedió en los cerdos diez años antes de la pandemia de H1N1”, explica García-Sastre.
Muestras procedentes de perros de china
Específicamente, en el nuevo estudio, los investigadores secuenciaron los genomas completos de 16 virus de influenza obtenidos de caninos en el sur de China (región autónoma de Guangxi) durante 2013-2015. Otros colaboradores clave del estudio incluyeron a Martha Nelson, especialista en análisis filogenético y reconstrucción de transmisión en CRIP, y Ying Chen, especialista en vigilancia de la influenza que trajo las muestras de China.
Los investigadores encontraron que los genomas contenían segmentos de tres linajes que circulan en cerdos en China: triple virus de Norteamérica H3N2, H1N1 de tipo aviar eurasiático y H1N1 pandémico. Además, los virus H1N1 de origen porcino se transmitieron hacia adelante en caninos y se recombinaron con los virus CIV-H3N2 que circulan endémicamente en perros asiáticos, produciendo tres nuevos genotipos CIV reordenados (H1N1r/H1N2r y H3N2r).
Los virus en el estudio fueron recolectados principalmente de perros que presentaban síntomas respiratorios en clínicas veterinarias. Los perros en ciertas regiones de China, incluido Guangxi, también son criados para la carne y los perros callejeros deambulan libremente, creando un ecosistema más complejo para la transmisión del virus de la gripe canina.
“El nuevo virus que hemos identificado en nuestro estudio es H1N1, pero proviene de porcino y es de origen aviar, por lo que es diferente antigénicamente de los nuevos H1N1 que se observaron en la pandemia y tienen un origen diferente al H1N1 anterior visto en humanos”, agrega García-Sastre.
Los estudios futuros se centrarán en caracterizar aún más el virus y evaluar, utilizando sueros humanos, si los seres humanos tienen inmunidad contra H1N1 canino o no. “Si hay mucha inmunidad contra estos virus, representarán menos riesgo, pero ahora tenemos un huésped más en el que el virus de la gripe está comenzando a tener características genotípicas y fenotípicas diversas, creando diversidad en un huésped que está en un contacto muy cercano con los humanos –advierte García-Sastre–.
La diversidad en los perros ha aumentado tanto ahora que el tipo de combinaciones de virus que se pueden crear en los perros representa el riesgo potencial de que un virus salte de un perro a un humano”.
“Los investigadores dicen que es hora de pensar en formas de restringir la circulación del virus de la influenza en perros. Estados Unidos está libre de influenza aviar porque cada vez que se ha detectado gripe aviar en aves de corral en este país, los pollos o pavos son sacrificados y eliminados de la circulación –detalla García-Sastre–. Hay intentos de restringir el virus de la influenza en cerdos a través de la vacunación y podría considerarse la vacunación para perros”.
Fuente: El Médico Interactivo