El mercado de los alimentos balanceados para perros y gatos en México ha crecido a tasa anual entre 7 y 8% desde el 2009, rebasando los 26,000 millones de pesos este año, no obstante, sus ventas podrían caer 10% el siguiente año de aprobarse el IVA de 16% en alimentos para mascotas, indicó Antonio Pedroza Martínez, presidente del Consejo Nacional de Fabricantes de Alimentos Balanceados y de la Nutrición Animal (Conafab).
A consecuencia de la caída en las ventas, la industria tendría que hacer ajustes y recortar al personal ocupado en el sector, expresó el también Presidente Ejecutivo de Malta Cleyton en entrevista con El Economista, “traemos buen ritmo de crecimiento, pero a consecuencia del impuesto habría reducción de turnos en las plantas, así como recorte en el personal temporal”, indicó el directivo.
El Presidente de la Conafab manifestó también que de aprobarse el impuesto, las inversiones del sector disminuirán; cabe recordar que Mars -dueña de Whiskas y Pedigree- amplió su planta productora de alimento para mascotas en el 2011 en tanto que Malta Cleyton inauguró una en marzo.
No obstante, sólo cuatro de cada 10 perros y gatos son alimentados con alimento industrial balanceado, mientras que en los demás persiste la tendencia de alimentarlos con restos de comida, refirió en entrevista Gerardo Galindo, director corporativo de Mercadotecnia de Malta Cleyton.
Gerardo Galindo, quien a su vez preside Amascota, una asociación del ramo de alimentos para mascotas, agregó que la mayor parte en volumen del mercado -correspondiente a 750,000 toneladas de croquetas- corresponde a las categorías económicas del alimento y de consumidores de ingresos medios a bajos.
Sin embargo, el Presidente de Amascota expresó que 250,000 perros podrían ser abandonados a consecuencia del aumento en el costo de su manutención, lo que aumentaría el problema de las heces fecales en la vía pública.
La Secretaría de Salud informa que 1.9 millones de perros y gatos defecan al aire libre en el país y que dichas heces fecales se pulverizan al secarse, vuelan y contaminan el aire, produciendo enfermedades para el ser humano, como conjuntivitis, salmonelosis y parasitosis, entre otras.
Asimismo, los directivos indicaron que ofrecen precios más bajos a refugios para animales, los que también saldrían perjudicados de implementarse el impuesto debido al incremento en costos, lo cual derivaría en un aumento de la problemática de perros y gatos en calle, pues tan sólo en canes la cifra se estima que llega a los 10 millones, de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud.
Fuente: El Economista