Un artículo* del canadiense John M. Fairbrother publicado el mes pasado hace un repaso del problema de la diarrea causada por Escherichia coli en porcino maternidad y transición. E. coli es una causa importante de diarrea en estas fases en todo el mundo, con pérdidas económicas importantes debido a la morbilidad, la mortalidad y la disminución de la ganancia de peso. Las cepas del patotipo más importante para los cerdos, E. coli enterotoxigénica (ETEC), producen enterotoxinas responsables de los síntomas clínicos de diarrea. La gravedad de la clínica y la prevalencia de la enfermedad pueden estar muy influenciadas por factores de riesgo como estrés, destete, bajo nivel de lácteos en la dieta y presencia de otras infecciones.
La detección e identificación de la bacteria permite un diagnóstico temprano y preciso de la enfermedad y la elección adecuada del tratamiento antimicrobiano, frente a los cuales se viene observando un aumento de las resistencias. Un diagnóstico preciso también ayuda en la toma de decisiones para poner en marcha las estrategias más efectivas y apropiadas para la prevención y el control de futuros brotes, para reducir la dependencia de las terapias antibióticas.
En cerdos neonatos los programas de prevención deben incluir buena higiene, temperatura ambiental adecuada, correcto aporte de calostro y elevado nivel de inmunidad mediante la inmunización materna con vacunas comerciales dirigidas a los antígenos de unión ETEC.
En lechones destetados, los programas de prevención deberían incluir una desinfección concienzuda entre lotes y un estrés ambiental mínimo. Para ayudar a reducir el número de E. coli patógena y prevenir la diarrea se pueden implementar medidas alimentarias como la restricción del consumo de pienso o dietas con alto contenido en fibra, o la complementación del pienso con ingredientes como ácidos orgánicos, óxido de cinc, prebióticos, probióticos o arcillas minerales naturales y modificadas. Se han utilizado diversas estrategias para conferir inmunidad pasiva para la prevención de diarrea posdestete, con resultados variables. Esto puede hacerse complementando el pienso con plasma porcino desecado o huevo en polvo de gallinas vacunadas.
Hay pocas vacunas comerciales disponibles para la prevención de la diarrea posdestete en transición. Últimamente se ha demostrado que una vacuna viva administrada por vía oral puede prevenir eficazmente la diarrea causada por ETEC:F4 en los virotipos de E. coli más frecuentes, y está disponible en varios países.
*John M. Fairbrother. Prevención de diarreas por Escherichia coli en lechones. Suis 81, octubre 2011, pp. 14-22
Fuente: albeitar.portalveterinaria.com